La relación entre Microsoft y China está muy lejos de poder ser considerada normal, algo que ha quedado claro en hechos como el calificar a Windows 8 de "amenaza contra la seguridad nacional" y que hoy vuelve a ser evidente.
Según el periódico South China Morning Post las autoridades del gigante asiático han iniciado un registro de cuatro oficinas de Microsoft, situadas en las ciudades de Beijing (Pekín), Shanghái, Guangzhou y Chengdu.
De momento no tenemos detalles concretos sobre los motivos que han provocado el inicio de esta investigación, comandada por la Administración Estatal de Comercio e Industria, pero el gigante de Redmond ha anunciado a través de Joan Li, portavoz de la compañía, que colaborarán activamente con las autoridades del país.
Por otro lado tampoco tenemos claro el posible impacto de todo esto en los planes a corto plazo que Microsoft tiene preparados para llevar a cabo en China, entre los que destaca sin duda alguna el lanzamiento de Xbox One, así que sólo podemos esperar hasta que lleguen nuevas informaciones que arrojen algo de luz.
