Apple combate las aplicaciones falsas con una nueva política de imágenes.

Apple combate las aplicaciones falsas con una nueva política de imágenes.

Apple combate las aplicaciones falsas

Poco después de alcanzar los 40.000 millones de descargas en la App Store, Apple anunció en su portal de desarrolladores que ha cambiado su política respecto a las imágenes que acompañan a las apps de esta tienda. A partir de ahora, cuando se suba un programa a la App Store no se podrán cambiar las imágenes que aparecen en la descripción si no se produce una actualización de la misma. De este modo, la compañía combatirá en parte el problema de las aplicaciones falsas.

Los creadores de este tipo de software fraudulento suelen presentar sus programas para que se somentan al estricto proceso de revisión de Apple con imágenes que sí se corresponden con su verdadera función y, una vez que han sido aprobadas, las cambian por otras que hacen creer que sirven para algo más interesante. Así consiguen engañar a los usuarios y que paguen por descargar aplicaciones falsas (en el sentido de que no sirven para aquello que prometen).

Un ejemplo de esta práctica fue la aplicación de Pokémon Amarillo que se colocó entre las más descargadas entre las apps de pago hace poco menos de un año. Las imágenes eran directamente capturas del famoso juego de Nintendo, lo que impulsó a un enorme número de usuarios a comprar el título. Cabe destacar que esto ocurrió a pesar de que no estaba desarrollado por el gigante de los videojuegos (es decir, era evidente que, como poco, se trataba de un clon, pero no algo oficial).

También es común encontrar en la App Store programas que supuestamente revelan claves de redes WiFi o permiten a los usuarios establecer códigos de desbloqueo por patrones similares a los de Android en sus dispositivos. Obviamente, no lo hacen, pero las capturas de pantalla hacen creer que sí son capaces de lograrlo.

En cualquier caso, Apple suele eliminar estas aplicaciones falsas con cierta rapidez. El problema es que cuando esto ocurre ya suelen haber engañado a algunos incautos. Con esta nueva medida, en vigor desde el día 9 de enero, será algo más difícil que esto ocurra, pues las imágenes no se corresponderán con la función que no cumplen (siempre, claro está, que no engañen a los empleados encargados de la revisión).

Por su parte, los desarrolladores de aplicaciones fidedignas no deberían tener ningún problema, ya que pueden cambiar las imágenes (si es que lo desean) cuando actualicen su programa.