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Si "el único medio de vencer en una guerra es evitarla", como decía George Marshall, las organizaciones parecen estar haciéndolo bien, al menos a la hora de proteger sus sistemas TIC frente a posibles amenazas e intrusiones externas.

Y es que, después de varios años en que se han multiplicado el número de ataques y cada vez afectan más a pequeñas y medianas organizaciones, no es de extrañar que las compañías hayan decidido realizar una inversión extra para prevenir cualquier sorpresa desagradable. Así, el gasto en seguridad de la información en 2014 alcanzará los 71.100 millones de dólares, un 7,9% más que el pasado curso, una tendencia que se mantendrá en 2015, cuando esta inversión superará los 76.900 millones, con un incremento del 8,2% interanual.

Son datos de Gartner, consultora que achaca esta apuesta por la seguridad –que se mantendrá en alza al menos hasta 2016– a la creciente adopción de la movilidad, la nube y los social media dentro de las organizaciones.

'Cloud' es la prioridad inmediata, la movilidad a partir de 2016

La nube, después de años de hablarse de su desarrollo y crecimiento, es ya una realidad palpable en muchas organizaciones alrededor del mundo. Sin embargo, las dudas acerca de la seguridad de estos entornos, especialmente de la cloud pública, no se han conseguido disipar del todo. Es por ello que Gartner señala a este segmento como el principal catalizador del mercado de la seguridad.

En ese sentido, aproximadamente el 10% de las capacidades generales de seguridad TI se ​​entregará en la nube el próximo año y más del 30% de las herramientas de seguridad para pequeñas o medianas empresas desplegadas en 2015 estarán también basadas en el cloud.

Por el contrario, la apuesta por la seguridad móvil seguirá sin despegar estos próximos años. Según los expertos, existe una falta de penetración de herramientas de seguridad entre los usuarios de las nuevas plataformas móviles pero la mayoría de los consumidores no tienen asimilada aún la importancia de usar antivirus en los dispositivos móviles y, por lo tanto, no ha comenzado todavía la compra masiva en esta área. De este modo, la seguridad móvil será presumiblemente una prioridad mayor para los consumidores y organizaciones a partir de 2017, cuando la concienciación haya dado sus frutos y la implantación de dispositivos móviles en las organizaciones esté más que consolidada.

Otro segmento que también está cobrando cada vez más importancia dentro de las organizaciones es el de la protección de los datos. No en vano, más de la mitad de las empresas utilizará en 2018 este tipo de servicios y ya en 2014 veremos como la industria dedicada a prevenir la pérdida de información anotará el crecimiento más rápido de este mercado, con un incremento anual del 18,9%.